El Centro Pompidou de París, acoge la exposición “Coder le monde”, un acercamiento a la historia del código digital y su relación con las diferentes disciplinas de la creación contemporánea. El desarrollo de las tecnologías digitales, junto a la propia evolución de los lenguajes de programación y la expansión de la red, han influenciado de forma decisiva en el modo de entender las artes visuales, la música, la arquitectura, el diseño, la literatura, o la danza.
“Coder le monde” está enmarcada dentro de una nueva edición de Mutations/Creations, un laboratorio anual de creación e innovación que organiza el museo francés, para cuestionar y reflexionar sobre los vínculos que pueden existir entre las artes, la ciencia, la ingeniería y la innovación. En esta segunda edición, junto a artistas, ingenieros, arquitectos y científicos se repasa la historia del código digital y cómo los artistas lo han aprovechado desde la década de 1960, cuando la computadora se vuelve accesible para el público en general.
© Coder le monde - Centro Pompidou
A través de más de 100 obras, la exposición “Coder le monde” hace un balance de la creación digital contemporánea en diferentes disciplinas. La muestra se articula en seis secciones: la historia del código, los algoristas, música y código, literaturas digitales, diseño digital de formas en arquitectura y diseño, cuerpo y código. De esta forma, el visitante puede analizar desde diferentes perspectivas y obtener una nueva lectura de lo que es la cultura digital, una premisa indispensable para comprender el mundo contemporáneo.
La exposición arranca con la historia del cálculo, la lógica o el algoritmo, disciplinas que nos llevan a filósofos como Pascal o Leibniz, que fueron los primeros en inventar una calculadora. Pronto vemos que en la década de los años 40 y 50 los lenguajes se independizan en forma de lenguajes de programación, que a partir de los años 60, se afirmarán como campos de experimentación y de creación. La exposición de Jasia Reichardt, “Cybernetic Serendipity” realizada en 1968, sacó a la luz a una generación de artistas del mundo entero reunidos en torno a las primeras experiencias plásticas del arte informático: los norteamericanos Michael Noll y Kenneth Knowlton, el alemán Frieder Nake, el suizo Gottfried Honegger, el movimiento de la Nove Tendencje (Vjenceslav Richter, Vladimir Bonacic…) y el grupo Art et Informatique de Vincennes (Jean-Claude Marquette…). Un poco más adelante, ya en las vanguardias, el movimiento Fluxus ve en el ordenador como un instrumento de formalización, que permite liberar las relaciones entre el signo y el sentido: Brion Gysin o Alison Knowles abrirán el camino a autores como Nanni Balestrini, Theo Lutz, Emmett Williams.
© Coder le monde - Centro Pompidou
En “Coder le monde” también se quiere destacar el trabajo de los creadores actuales, procedentes de todas estas disciplinas. Obras diseñadas como espacios inversivos, nos revelan la llegada de un mundo digital que podemos ver en el trabajo de Driessens & Verstappen, Peter Campus, Casey Reas (el creador del programa Processing) o Charles Sandison. La exposición también recoge un universo plástico relacionado con la formalización digital, un mundo de píxeles y vóxeles (3D) que podemos encontrar en el trabajo de artistas como François Morellet, o en las recientes obras plásticas de Farah Atassi, Mishka Henner y Philippe Schaerer. Píxeles y vóxeles también suscitan una reflexión crítica, la de un modernismo radical que nutre el trabajo de MVRDV, Troika, Olga Kisseleva… La formalización de matrices digitales y la pixelización que conocemos son, sin duda, un vasto territorio de estudio y de expresión plástica.
FECHA: Del 15 de junio al 27 de agosto de 2018
Redacción Madridartprocess.com | 18 de Julio 2018
